Ingredientes
Medio kilo de judías
2 chorizos asturianos
2 morcillas asturianas
100 gramos de lacón
100 gramos de beicon
1 cebolla
1 ajo
Preparación
Ponemos las judías (fabes) en abundante agua fría desde la noche anterior.
Ponemos las judías en un caldero y la
cubrimos con agua. La cantidad de agua que le ponemos a las judías es
importante, le añadimos un centímetro
más por encima de las judías, solo que estén cubiertas. La ponemos a hervir a
fuego muy fuerte con una hojita de laurel. Las
judías despenderán espuma que con
una espumadera iremos quitando, esto hay que hacerlo las dos o tres veces que
“asustemos” las judías.
Asustar las judías consiste en echarle un
vaso de agua fría en el caldero, esto hace que se corte la cocción del agua.
Esto es importante para que las judías no se rompan.
Después de asustar las judías se le añade la
cebolla picada, y el ajo machacado, el chorizo, morcilla, beicon, lacón y
cubrimos con agua pero solo un poquito más del nivel de los ingredientes para
que no se quede muy aguada la fabada.
Una vez que vuelva a hervir el agua bajamos
la temperatura y tapamos el caldero
durante unas tres horas o hasta que estén tiernas
Casi
al final de la cocción probamos la fabada y si necesita sal se la añadiremos
Uno de los ingredientes principales de la
fabada es la paciencia por eso hay que dejarla que se haga muy despacito.
De vez en cuando movemos los ingredientes
para evitar que se pegue.
Una vez hecha se saca el chorizo, morcilla,
beicon, lacón y lo cortamos en trozos pequeños y se lo volvemos añadir a la
fabada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario